viernes, 23 de diciembre de 2011

Plou i fa sol

Avui es un d'aquets dias que plou i fa sol al mateix temps...

"Veurem el món des de l’aigua
Entre peixos i algues
I se’ns cremarà la pell."




Plou i fa sol
Plou i fa sol, una cançó d’amor, I el record d’una porta tancada.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Cuanta falsedad...

Todavía hoy no comprendo por donde vas. No entiendo si pretendes confundirme o si pretendes arrebatarme lo que es mío, como pensaba hace años, creyéndome engañada por alguien que por suerte ya no está. Pero lo grave es que viví en una mentira parcial, una mentira con pinceladas de realidad, de verdad. Es posible que entre esas pinceladas, estuvierais tú y tu manera de verme, tu manera de vernos. Y aún hoy me sorprendo cada día, viendote sin verte, todavía sintiéndome culpándome por mis juicios y por mis actos.
Cierto es que no me queda mucho de aquellos días. Cierto que a veces lo lamento, porque en parte soy la culpable. Sin embargo, tristemente y cada día que pasa, me doy cuenta de que no era cuestión mía, sino tuya. Que no importaba lo que yo hiciera o dejara de hacer, ya que sólo había un final posible. Después de tantos años, no puedo creer que sigas siendo tan ingenua. Detrás de esa aparente ingenuidad, había resentimiento, había palabras con objetivos cambiados, había intenciones distintas. Satanizarme en mis propias espaldas, excusándote en otros y echándome la culpa a mí de lo que tengo, de lo que he conseguido y de que tú no lo tengas.
En cierto modo, tratabas de sembrar la semilla de la duda, de poner las primeras piedras en lo que deseabas que fuera un muro, que se alzara fuerte y alto, no teniendo siquiera valor para dar la cara. De hecho, aún sigues intentándolo, con pequeñas escaramuzas que no llegan ni llegarán a nada. En definitiva, intentas romper algo que cada día que pasa más se solidifica y se fortalece, gritando que no tienes ninguna credibilidad. Nada de lo que digas, nada de lo que hagas cambiará nada, así que deja de intentar arrebatarme lo que es mio. Cuando antes te hagas a la idea, mejor.

martes, 13 de diciembre de 2011

...

Recuerdo tus palabras, las que dijiste una tarde cualquiera, de esas en las que me asomaba a la ventana, y mientras yo fumaba, tú te enfadabas con el mundo. Ahora ya hace tiempo que no fumo ni que me asomo a la ventana. Ya hace tiempo que no te veo, enfadada, buscando una explicación. Pero tus palabras siguen ahí, y a veces pienso que realmente me conocías mejor de lo que yo esperaba. Sabias mirar por mis ojos y decirme algo que nadie jamás me dijo, y me atrevería a decir, nunca volveré a escuchar. Recuerdo que tus mejillas se ponían del color de tu pelo, cuando sofocada, te empeñabas en que tenías razón. Y así son las cosas, según parece. Sé que no leeras esto, ya hace tiempo que no lo haces, pero de vez en cuando te recuerdo y te añoro.