jueves, 30 de diciembre de 2010

Que en vez de 2 sean 3

"Esta medianoche,
entre el champán y las uvas,
volveré a extrañarte,
y a desear otro año,
otro año más contigo,
y que en vez de dos,
sean 3"

miércoles, 29 de diciembre de 2010

***


- Oye, no vuelvas a olvidarte de mí, ¿ vale? Para la próxima vez que nos veamos...
-¡¡Yo no me habia olvidado de tí!!.
Se fue corriendo a la habitación. Yo fui detrás y ví como cogía la foto que estaba en la mesilla. Me la enseñó y dijo
- Mira, esta es Bea, osea tú, y este soy yo. Estábamos celebrando mi cumpleaños, en el parque Pignatelli. Yo no me había olvidado...

martes, 28 de diciembre de 2010

Tout est un defí

I used to watch a wall just in front of mi face and I thought my world finished there. My head and my arms were pushing the wall to break it. However, there wasn't any wall really. It was just my imagination. Nothing was preventing me from running wild and left behind everything. Finally, I jump up my own thinking and start running and running and running...


"I stopped fighting with nobody but myself"


And then, suddenly I felt all the universe turning arround me and I started dancing and dancing and dancing...Hope I'll never stop doing it.



Also you and your hands arrived, and helped me to not fall down. They are still there for helping me and I won't them to go.

"Aiutami a vedere il mondo in modo diverso.
Non andare è resta con me per sempre
Gracie amore"


jueves, 23 de diciembre de 2010

Ho volgia di te

* è tutto come un incanto *

martes, 9 de noviembre de 2010

Reflexión 9

-¿Qué te pasa?
-Nada..
-Nadanadanadanadanada...Nada no. Siempre dices que nada y siempre es algo. Asi que desembucha.
- No sé...simplemente estoy pensativa. ¿Qué pasa, que tú no piensas?
- ¡Pues claro que pienso! Pienso cuando tú piensas, ya lo sabes. A veces pareces tonta, hija.
-...
- Bueno, ¿me lo vas a contar o no? Sino te dejo en paz y no te pregunto más.
-No sé. Pienso en lo que no tengo ahora mismo, en lo que he perdido.
-Vaaayaaa! ¡Qué original eres! ¿Y por que no piensas en lo que tienes? Vamos, yo lo digo más que nada para que no te amargues y cambies esa cara de panto que tienes.
- ¿Cara de panto? Tú si que tienes cara de panto. Ya bueno, en eso también pienso a veces.
- En fiiin... y bueno, ¿qué has perdido? A ver si hablando del tema se te pasa, que al final me vas a amargar a mi también, por muy "chunga" que parezca.
- Pues principalmente gente. Gente que solía estar en mi vida y que ya apenas está. No los he perdido del todo, pero casi.
-Ya bueno. Pero eso es lo que tenía que pasar. Tú tienes tu vida, tus intereses están en otra parte ahora mismo. Y así es como tiene que ser. Evolucionas y cambias. Al igual que tú avanzas y maduras, tus relaciones cambian, por obligación. Tú no estás echando a nadie de tu vida pero por las circunstancias, la distancia...se van alejando. Es lo que hay, mona. Así que lo mejor que puedes hacer es concentrarte en lo que tienes entre manos y dejar de lamentarte, y de repetirte lo poooobrecita que eres.
- Si yo lo entiendo. Si ya sé que tiene que ser así. Pero sabes, a veces, inexplicablemente, me siento sola y, bueno, me da por pensar...
- ¡Pero si no estás sola! ¡Pero si además lo sabes! Yo lo sé, asi que tú también.
- Eso, tú sigue interrumpiendo. Nunca me dejas hablar. Últimamente no me dejas decir nada, ni pensar en nada....no puedo mover un dedo sin que estes encima, mirándome y controlándome al milímetro.
- ¡Aun encima te quejas! Encima de que te ayudo. Pues claro que no puedo dejar que divagues y te pierdas por ahí quién sabe donde. Soy la única que puede evitarlo. Tienes una vida muy ocupada. Estás todo el día de un lado para el otro y apenas te queda tiempo para pensar. Y de las veces en que piensas, pues no voy a permitir que te quedes como una tonta mirando por la ventana con el alma en pena. Tengo que venir corriendo a recordarte las cosas buenas que hay en tu vida, porque parece que te empeñas en olvidarlas.
Hoy sin ir más lejos, ya no me has hecho caso. Llevo varios días diciendote que intentes mantener la compostura. ¿Donde está tu orgullo? Porque lo tienes, lo que pasa que no le dejas actuar. Deja ya de rogar minutos. Las cosas son como son y punto. Despierta de una vez y disfruta, por dios!¡Qúe angustia de mujer!


Y derrepente se desvaneció. Se fue con la misma rapidez con la que vino. Se hizo el silencio en la habitación y en mi cabeza. La paz volvió, despacio, a invadirme. Qué a gusto...


jueves, 4 de noviembre de 2010

Distancia

"En tu habitación, de pie, estiras los brazos hacia los lados tanto como puedes. Cierras los ojos, respirar ondo e intentas sentir las paredes en la punta de tus dedos en un vano intento por hacer algo que sabes que es imposible. Sabes perfectamente que la distancia es demasiada. Es inutil y estúpido, pero estas desesperado por demostrarte a mismo que puedes con todo, incluso con lo más complicado. Finalmente desistes, como era de esperar. Te sientas abatido en el borde de la cama, enfadándote con los metros, los kilómetros.., porque no se dejan abarcar, no se dejan controlar. Estás ahí parado, con la mirada fija en ninguna parte, sintiendo como la habitación gira a tu alrededor, burlándose de tí. Y así te quedas el resto de la tarde, sin hacer absolutamente nada más que pensar y recordarte que nada se interpone entre tus brazos y la pared."

miércoles, 13 de octubre de 2010

Te cuento

Buenas noches, te digo, susurrando para no despertarte. Me quito los tacones y los dejo con cuidado junto al armario. Es tarde, muy tarde; la medianoche ya esta lejos a estas alturas. Voy al baño a tientas, sin luces que perturben la paz que se respira. A duras penas consigo distinguir mi reflejo en el espejo. Me quito el maquillaje y me mojo la cara con agua fría.
Con cuidado, levanto la sábana, te esquivo y me coloco, acurrucada junto a tu espalda. Siento tu calor, agradable en mis pies frios y tu respiración, agitada por un momento al intuirme, moviendome con el mayor sigilo que el alcohol permite. Apoyo la cabeza en la almohada, justo detrás de la tuya, huelo tu pelo y te cuento. Comienzo a contarte quién soy y cómo he llegado hasta este sitio. Te hablo de mis sueños, de mis locuras y de mis miedos. Te cuento lo que no puedo contarte con los ojos abiertos, con la luz del día. Te cuento, te cuento descubriéndote hasta el más oculto de mis rincones. Somos un equipo, dos piezas de un puzzle que encajan a la perfección, complementándose en un todo.
Las palabras salen solas de mi boca, con la poca conciencia que me queda. Mis labios se mueven solos, oponiendo resistencia poco a poco, hasta convertirse en un murmullo, hasta dormirme plácidamente, como si mis palabras fueran la mejor nana jamás cantada.

Sabes, las tostadas me saben mejor que nunca esta mañana.

jueves, 7 de octubre de 2010

Amarillo

" Es como si un mago, de estos que tanto gustan e impresionan a los niños, tan elegantemente vestido con su traje negro y su sombrero de copa, señalara con su dedo índice, cubierto por un guante blanco hacia su boca, de la cual asoma la esquina de un pañuelo de vivos colores, incitándome para que tirara de ella. Nunca me ha gustado ese truco porque el mago sigue sonriendo y no es posible estar contento cuando tienes un pañuelo dentro de la boca que te tiene que estar ahogando.
Entonces tiro de la puntita que asoma, y comienzan a salir recuerdos, anudados unos a otros, con vivos colores que me recuerdan que siguen ahí, que me recuerdan lo que pasó. Sobre todo, ese amarillo tan vivo, que me evoca recuerdos borrosos pero agradables que sé que no se repetirán "


"me hago un vestido con tó lo que he perdido
y ya tiene sentido sonreir..."


Otra vez vuelvo a sentir ese pinchazito tan familiar. No duele, por supuesto, pero es realmente molesto. Es como un pellizco que aparece a ritmo constante, aunque no es la molestia física lo más importante. Es la constante reflexión, el volver a repasar los hechos una y otra vez cada vez que aparece. Cada vez que pincha, ya sea esta vez o cualquiera de las anteriores, me supone el recuerdo de momentos pasados, la formación de imagenes mentales de recuerdos almacenados en mi memoria a largo plazo, evocados por asociación a momentos actuales. El problema es que, como estudiante de psicología, sé que si se reproduce tantas veces un recuerdo, si tratamos de visualizar y adornar en nuestra mente todos y cada uno de los detalles y acontecimientos de lo que fuimos testigos y además de ordenarlos cronológicamente, elaborando las relaciones entre ellos, corremos el riesgo de rellenar las aseguradas lagunas con nuestras propias e inconscientes invenciones. De modo que es posible que creemos vivencias nuevas o bien que distorsionemos las vividas. Pues bien, digamos que yo estoy ya en el borde de la linea. La culpabilidad y el arrepentimiento me han llevado a repasar tantas veces los hechos que ya no sé cuál precede cual, y ni siquiera tengo la certeza de que fuera realmente como mi cerebro lo recuerda. Además, el hecho de que sea la culpabilidad la que guía mis pensamientos, hace más probable que la evocación de mis recuerdos y el relleno de los espacios vacíos lo haga con presuntos acontecimientos negativos.

viernes, 1 de octubre de 2010

Avellanas

La sensación de estar en medio de la nada, alejados de todo y de todos.
Por las noches, no se escuchaba mas que el cantar de los grillos y el soplar del viento entre las hojas de los árboles.
Una piscina de agua fría, sin ropa y con un chorro de agua caliente en la espalda.
El atardecer envueltos en una toalla, tiritando entre abrazos cálidos.
Higos y moras
Ducha caliente y cama enorme.
Invasión de camas y besos en la espalda.
Carne a la brasa en la oscuridad.
Paseos y ruidos extraños.
Salamandra sin cola y jabalí invisible.
Flotadores, miedo y comprensión.
Sol, mucho sol y pies cansados.
Lluvia con bolsas de plástico.
Puerto, mar y cine.
Suma y suma sin resta alguna.
Tú, sólo tú.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Soledad, con todas las letras

Y qué es lo que queda cuando sientes un espacio tan vacío e inerte, un abismo que comienza donde termina cada poro de tu piel que se precipita al vacío, un acantilado de bordes escarpados del cual estas tan cerca que puedes ver la oscuridad que se precipita hacia al fondo.
Es inexplicable e irracional, completamente insostenible. No tiene sentido dejar que una miserable emoción de tristeza y soledad se apodere de la totalidad de los pensamientos. Pero a veces pasa, y todavía no sé por qué, todavía no puedo controlarlo ni mucho menos evitarlo.
Fruto, en parte, posiblemente de los errores propios, de meter la pata dos años consecutivos eligiendo mal, sin ser capaz de visualizar correctamente las consecuencias antes de elegir, de seguir siendo igual de ingenua que siempre.
Me levanto de la cama como un día más. Pero no es un día más porque hoy los acontecimientos parecen haberse puesto todos de acuerdo para retroalimentar esta soledad odiosa, que no puedo quitarme de encima por mucho que quiera y por mucho que lo intente. Pequeñas cosas que otro día cualquiera no te importaría parece que hoy se hacen cuesta arriba.
Lo más ilógico de todo es que sé que no estoy sola, lo más increible de todo es saber que la realidad no se corresponde con lo que siento y lo más cansado es la lucha para imponer la objetividad, la verdad que debo imponerme desde fuera de mí misma, porque hoy, concretamente hoy no soy capaz de ver.

Quiero quitarme ya esta maldita venda,
quiero ser capaz de ver las cosas tan y como son
y sentirme afortunada por lo que tengo,
que en el fondo sé que es mucho.

martes, 31 de agosto de 2010

Cabeza y corazón

- La cirujía ha ido bien...
- Enhorabuena...

- No puedo hacerlo... Tienes dudas.
- ¿Tú no?

- No.

- Qué...dulce...Yo...quiero pasar el resto de mi vida contigo, te amo. Es lo que siento ahora mismo, pero...no...sé...
- Esperaré a que lo sepas.
- No..no puedo saberlo..., nadie lo sabe.
- Yo sí.


"Yo sí"


viernes, 27 de agosto de 2010

Lavadora

Una mano que pasea despacio, deteniéndose en cada curva, ascendiendo suavemente, amoldándose a la forma de la piel que se haya bajo su piel. Al principio, avanza tímida y cautelosa, pensando antes cada paso, mirándose fijamente a sí misma, sin fijarse en los ojos que la miran. No haya obstáculos en su camino, y nota como la suave piel que acaricia va destensandose lentamente, nota como la acepta y como quiere que continúe. Se siente más cómoda, ya no tiene miedo. Es entonces cuando levanta la mirada y se centra en sus ojos, en las pupilas dilatadas y en el oscuro color del iris, que apenas permite distinguirlas.
Su mirada; su mirada expresaba tantas cosas aquella tarde que no encontraba palabras para describirla. Encontró ese afecto que tanto añoraba y que ya conocía, encontró esa aceptación que tanto necesitaba y que tanto miedo le producía al mismo tiempo. Solo podía mirar y seguir mirando, seguir perdiéndose en sus ojos sin dar un paso más, hasta que sintió como su propia atracción le empujaba hacia adelante, a él, le impulsaba a acercarse y a sus manos, a continuar su camino [...]




Unos labios que ya no tienen miedo, que siguen el camino de las manos, mucho más deprisa y sin titubeos, hasta quedarse sin aliento y dejar de sentir esa piel bajo la suya, porque ya la siente como propia, coordinando todos los movimientos y moviéndose al ritmo de sus palpitaciones, latiendo al unísono..



*¿Quieres mirar la lavadora conmigo?

lunes, 23 de agosto de 2010

Reflexión 8

[...] Pretendes calcular cada paso que das, sabiendo perfectamente donde lo estás dando y el tipo de terreno sobre el que te apoyas. Si es resbaladizo, seguramente pienses tanto y tanto que acabes por no darlo. Riesgos los justos, si señor, siempre has sido así. Mediocre, al puro estilo aristótelico, buscando la estabilidad y el equilibrio. Jamás has dejado a tus sentimientos brotar libremente, dejar tus brazos libres si quieren abrazar o a tus labios si quieren besar .Tras cada uno de tus gestos siempre había un pensamiento; eran resultado de una disputa entre el sí y el no, consecuencia de las posilbles consecuencias. Has vivido siempre entre dos márgenes, con la vista fija al final del camino, sin disfrutar del paisaje mientras caminabas. Sé que eres una persona de éxito, respetada. Te has ganado la admiración o la envidia de los demás por tus logros. Pero sabes, yo no quiero ser así. Me gusta estar perdida, dudar de todo y sobre todo, adoro equivocarme. Meter la pata es una de mis virtudes, muchas veces por dar rienda suelta a lo que siento...son mis equivocaciones las que demuestran que soy libre, porque actúo tal y como quiero actuar en un momento dado, sin pensar en nada más que en mí y en lo que quiero hacer. Y no hay nada que más aprecie en este mundo que la satisfacción que produce sentirse libre...

"Sentir tu alma fluir, en armonía y unión con todo lo que te rodea..."

martes, 10 de agosto de 2010

Frío

- Me gusta que haga frío, ¿y a tí?
- Frío no, ¿por qué?
- En invierno tiene que hacer frío, para que luego nos guste la primavera, verde y preciosa.
- Yo prefiero el verano, que hace calor.
- Es necesario que la vida tenga sus ciclos. Todo nace y todo muere.
- Todo no.
- ¿Tú conoces algo que dure siempre? Así es la vida, implacable, alegre y triste. Todo caduca con el tiempo. El amor tambien. La gasolina del coche, por ejemplo, si olvidas que se va a acabar te dejará tirado en medio del camino...


Yo te voy a querer siempre. Y si se acaba la gasolina, me muero.


jueves, 5 de agosto de 2010

Reflexión 7

"...y me adentré en la espesura, sin preguntarme siquiera por qué. Me sentí entonces rodeada de una atmósfera extraña, diferente. Me sentí forastera en mi propio corazón, como si los latidos no fueran mios, como si no fuera yo la que estaba ahí. Realmente no lo estaba. Me había ido, lejos, muy lejos, más allá de donde los ojos alcanzan a ver, más allá de la línea del horizonte que dibujaba el mar. Ajena al tacto de la arena bajo mi cuerpo y al ruido de los fuegos artificiales. Alcancé antes a ver, como me sonreía con la mirada, justo antes de tomar mi mano, y, sin mediar palabra, avalanzarse sobre mí.."

miércoles, 4 de agosto de 2010

Hay que mirar para dentro

He exprimido al máximo mi tiempo y he agotado todas mis energías. Satisfacción es lo que ahora siento por haberme atrevido a salir fuera, a explorar y a conocer. He aprendido muchas cosas además de idiomas, mi confianza en la gente se ha retroalimentado positivamente, demostrándome que no es tan ingenuo ni descabellado creer que hay buenas personas con buenas intenciones. Una vez más, me he dado cuenta de lo importante que es ser crítico y no permitir que los estereotipos, los sucesos o las ideas que esta, nuestra sociedad quiere imponer sustenten la base de nuestro pensamiento, sustenten la forma que tenemos de ver y de enfrentarnos al mundo. La aversión, el racismo, el miedo a otras culturas es algo totalmente irracional, infundado, algo que sucede cuando uno se encierra en su propia burbuja y se defiende diciendo que lo suyo es lo mejor y que los demás son todos malos. Turcos, sirios, uzbequistanos, kwaities son completamente diferentes a nosotros pero no podemos por ello considerar que no merecen la pena, que cuanto más lejos estén mejor porque todo eso esta basado en lo que nos transmiten otros y no en lo que nosotros mismos hemos conocido, juzgado, analizado y finalmente elaborado una idea, una idea basada en nuestra propia experiencia, que a fin de cuentas es lo más cercano a la propia verdad de cada uno. Bromistas, educados, enormemente generosos, cálidos...

Y después de todas estas experiencias tan positivas y enriquecedoras, toca relajarse, estudiar y volver a mi nuevo piso. Reencontrarme con mucha gente a la que he hechado de menos y de la cual me he acordado más de una vez a lo largo del verano, de hecho, ya empiezo a notar el frío...

"En silencio
esta lo que mas quise
lo que mas quiero
que acumulamos mucho
y respiramos menos
que el aire cada día es mucho menos fresco
que cada día que pasa sigo echandote de menos
que vaya por donde vaya aun te huelo"

* ..ya estoy cansada de ser la muchacha, la que nadie muchas veces creyó

Osadía

Siempre he sido de las chicas de "Besos en la frente", como decía el maestro Sabina, tal vez no por el mismo motivo, aunque no voy a ponerme ahora a explicar mis motivos. Por eso, necesitaba estar segura de muchas cosas. Necesitaba seguridad en mi misma, ver que puedo desenvolverme y controlar la situación....¿egoista? Sí, en cierto modo, sí. He jugueteado, lo sé, sin dar nada a cambio. No atendí doce llamadas, evitaba comentar qué iba a hacer o dónde iba a ir, no daba importancia a muchos gestos aunque fuera consciente de ellos. No quise hacer daño a nadie pero tampoco quería hacermelo yo ni mucho menos engañarme obligandome a sentir algo que no sentía.
Posiblemente, en otras circunstancias, con otros pensamientos en la cabeza y con otro tipo de perspectivas, hubiera sido distinto, o al menos, hubiera existido una posibilidad.

"Quien tiene siete vidas
y dos ojos de gata callejera
no se va con cualquiera.
De su noche se espera
un broche de promesas incumplidas.

Mejor no equivocarse
no me pidas jamás lo que no doy
ya sabes cómo soy y si quieres me voy"


"Nunca he sido lo que aparenté ser, tan solo me metí en el papel. Lucir un antifaz siempre fue mi especialidad. A veces, me gusta jugar a mandar, a controlar, sentir que tengo el poder. "

domingo, 1 de agosto de 2010

De vuelta al mundo real

Puede decirse que sí. He pasado tres semanas en otro planeta, escapando de la abrumante monotonía del día a día.
Llegué cansada y asustada, intentando entender lo que me decían, sin mucho éxito, aunque saboreando la victoria en los labios y portando la bandera sobre los hombros (extraño, pero cierto, parece que el patriotismo se rebela fuera).
Ya desde el primer día, fuimos una sola persona. Todos juntos a todas partes, nos juntamos como una piña. Es dificil coger tanto cariño en tan poco tiempo. Al principio, solo nos unía que todos estabamos allí, perdidos, desorientados. Ahora, nos unen muchas más cosas.
Luego, llegaron árabes, turcos, italianos, uzbequistanos entre otros varios, y con ellos, Shi-sha party, barbacoas in the beach, comidas bajo el globo y paseos con filtreo. Tratadas como autenticas reinas, regalos, invitaciones, compartiendo chaquetas y toallas.
Agracezco ser de mente abierta y no haber viajado con ideas preconcebidas, con estereotipos o cosas por el estilo. Curada de humildad, impresionada por la generosidad y el cariño con el que nos trataron a pesar del poco tiempo que hacía que nos conocian.
Inevitablemente más unida, si todavia era posible, a mis pequeñas. Compartiendo habitación y baño sin tirarnos de los pelos durante tres semanas.
Todo este clima, el buen humor que nos inundaba a todos, los juegos de palabras en varios idiomas, los fuegos artificiales sobre el globo, el calimocho con toque inglés, la playa de noche con largos paseos entre italiano y español, las sonadas "situations", el "dale don dale" se unieron para configurar una atmósfera única y especial, algo semejante a otro mundo, completamente distinto a mi vida anterior.
Pero llego la hora de volver. Los abrazos, los lloros con hipo, el "tenemos que quedar", ese "chao bella" al oido, ese "everybody, come to Azerbaiyán!! a voz en grito" y mis ganas de llorar contenidas que estallaron en el aeropuerto, en la ultima de las despedidas.
No puedo más que dar las gracias a todos por aportar su granito de arena y hacer que esto haya sido posible.


I'll miss you all, guys

sábado, 10 de julio de 2010

A la aventura

Me bajo aquí mismo sin saber donde, solo porque parece el centro. Busco mapas en las marquesinas de los autobuses para intentar no estar tan perdida. Voy preguntando a las camareras de los bares dónde estoy y como llego a otra parte. Subo más de trescientas cincuenta escaleras con la mochila al hombro. Me quemo por el sol. Busco conchas en la playa y salto las olas del mar. Fotografio catedrales, cócteles y a Irene en la plaza mayor. Me da miedo, pero disfruto. Me gusta sentir ese miedo que crea la confusión, la incertidumbre, la sorpresa de encontrar cosas nuevas.
Sin embargo, cuando tengo miedo, miedo de verdad, ese miedo que no es divertido, solo puedo ir a un sitio. Es al único sitio al que iría a ojos cerrados, sin necesidad de buscar nada que me indique el camino, porque lo conozco perfectamente. Es un lugar cálido y blandito, que me arropa como a una niña y me hace sonreir.
Supongo que ya sabrás donde está ese sitio. No te lo lleves.


viernes, 9 de julio de 2010

Aceptación total

Eso es lo que parece. Al fin no se asemeja a un entramado de engaños que uno se impone sino que es totalmente real y totalmente pacífico. No hay lucha interna entre bandos opuestos ni pensamientos negativos que asedien mi tranquilidad y mi seguridad. Parece que por fin me he acostumbrado a manías y fobias ajenas varias. No sé si me parece bien. Sería como desestimar mi apreciación personal y mi punto de vista situacional en favor de un equilibrio y bienestar tal vez pasajero. Ecológicamente está claro que es la opción más adecuada, pero,¿qué hay del propio orgullo y del gusto que produce pensar como uno piensa (aunque pueda ser destuctivo a veces)? En esta ocasión creo que prima el bienestar. Hay demasiadas cosas en juego como para perder el tiempo dejando que mi propio negativismo me invada y tenga que invertir mis esfuerzos en liberar una batalla interna de bandos.
Desde fuera, bien puede parecer que he alcanzado un nivel de orgullo tal que no flaqueo en lo que solía flaquear, o bien que se me ha olvidado lo que me solía hacer flaquear. Pero nada más lejos de la realidad. Se trata de una aceptación totalmente pacífica que vino a mí sin avisar y sobre la que apenas tuve que pensar. Recuerdo las mismas cosas que solía recordar, pero de forma tranquila,sonriente y sin angustia. Creo que me estoy volviendo más estoica y más segura a cada paso que doy y a cada experiencia que me toca vivir.

"Me he tumbado en medio del camino para disfrutar de todo lo que se me olvida cuando camino hacia un objetivo fijo...pero sin olvidarme de él y recordándolo día tras día"


domingo, 4 de julio de 2010

Artificial

Es inutil remover lo poco que me queda del pasado. A veces se enciende, otras veces no, permaneciendo en el silencio y oscuridad del fondo de la memoria. Son recuerdos que no quieres que resurjan. Algunos porque te hacen sentir una ira homicida hacia la persona que tienes justo sentada delante de tí, a la cual le viene justo para recordar como se llama. Pero yo todavía recuerdo el desprecio con el que me miraba y con el que me sigue mirando a pesar de todo. De niña, tal vez me engañaste, pero no ahora. La inocencia te la van arrancando poco a poco, clavando las uñas en la carne. Ahora, como mucho, vas a conseguir que yo también te mire así (y que la razón además la tengo yo). Otros recuerdos, simplemente crean confusión. Despiertan sentimientos dormidos, deseos que no fueron atendidos en su momento y quedaron adormilados por la llegada de nuevos deseos. Recuerdo la de cosas que he hecho, la de oportunidades que he tenido delante y que no he sabido aprovechar. Locuras adolescentes y sentimientos desbordados, dificilmente controlables. Ahora, por suerte, canalizados, descifrados, asimilados y cambiados, no por mi misma, sino por ellos mismos, en conjunción con la llegada de más sensaciones.
Por desgracia, no hay marcha atrás. Las cosas están como están y no puedo hacer nada; el presente no es buen momento. Me gustaría que fuera un recuerdo. Algo que sucedió cuando debía suceder y que pudiera recordar con cariño.
Todos tenemos un momento, un pequeño instante durante el cual la oportunidad pasa delante de nuestras narices. Es cosa nuestra tomarlo o dejarlo, pero una vez pasado, ya no hay marcha atrás. Por eso, todavía, cuando ves aquello que simboliza el recuerdo que pudiste tener y no tienes, el estómago se encoje

viernes, 2 de julio de 2010

Punto y seguido.

Empezó como acabó, volvió a empezar como empezó y, como era de esperar, acabó igual que acabó....¿?Y volverá a empezar como empezó, como siempre empieza¿?

"NosLeimosLasCartasDeAmorGuardadasEnLaMiradaDeLosOjosQueAnsiososBuscanUnasManosQueApretar Nos SentíamosDemasiadoSolosParaContinuar ElTiempoApremiabaYNosRobabaLosBesos SubíAlDesvánDeLaAceptaciónYMeMarché,AunqueNoConLo Puesto TuTeFuisteDíasDespués HagamosDelOlvidoPrincipioFundamentalYBusquemosPazSinNecesitarnosMutuamente.HorasMuertasPasanPorElBalcónARitmoLentoMientrasLasNubesSeApoderanDelBrillanteSolAntiguo EnElFondoAnsiamosVolverAlBosqueDeÁrbolesBlancosVerdesOMarronesSegúnElDíaYAlMullidoSueloDeLaAlcoba
EstaHistoriaAcabaDondeEmpiezaUnPapelEnBlancoDondeAmbosPintamosPorIgual
EstaHistoriaEsUnContinuoPuntoYSeguidoParaDos.

TanSoloEsperoQueNoSeConvierta
EnPuntoYAparte."

viernes, 25 de junio de 2010

Malos pensamientos

Qué es lo más apropiado cuando por algún motivo que escapa a la razón nos invade un mal presentimiento. Completamente amorfo e indefinido, no sabemos exactamente a qué se debe o con quién esta relacionado. Es una sensación que aparece de repente, sin previo aviso. Puede estar relacionado con algo en concreto, sí, pero solo es una pequeña sugerencia y no una certeza...algo perfectamente comprensible, dado que no esta basado en nada aparente.

Profundizando algo más en ese presentimiento, parece como si algo fuera a terminar, no a terminar temporalmente sino de forma definitiva y lo peor de todo, inevitable. Son cabos sin hilar en un intento por construir una sucesión lógica de acontecimientos pasados y preveer los futuros. Interrelacionar relaciones pasadas, presentes y futuras, asociarlas con los sentimientos que desencadenan y pueden desencadenar....al final, dada la imposibilidad de manejar tantas posibles variables, acaba por no llegarse a ninguna conclusión clara. Tan solo queda el resquicio de algo que pudo ser y no fue, que unido a los propios sentimientos del costurero en cuestión acaban por producir algo tan ambiguo y poco atrevido como una sensación, una sensación negativa. Es la inseguridad que esta sensación produce, el hecho de no tener una certeza lo que hace que no quiera irme, porque siento que algo va a romperse.

Tras unas horas de olvido, volvemos a la situación con la cabeza más fría que antes. Tal vez la perspectiva tomada para tratar de dilucidar el asunto no ha sido la adecuada. Es entonces cuando recuerdo que la objetividad prima y decido eliminar mis propios sentimientos del juicio. Analizando los hechos uno por uno y tratando de ponerme en la piel de los demás implicados tal vez el presentimiento no tenga ninguna base lógica para que se de. Es todo un alivio cuando la razón es capaz de ofrecer un foco de luz entre el oscuro y desordenado mundo de los sentimientos y las emociones. Por unos instantes me sentí liberada, tranquila y satisfecha por haber desarmado la sensación negativa. Sin embargo, no podemos negar que somos un compuesto de ambos, de razón y de emoción, así que el destierro es solo momentaneo. Para fortalecer nuestro propio afrontamiento activo, a veces necesitamos ayuda externa. Ya sé que lo he escuchado de sus propios labios y que puedo llegar a ser cargante por recaer en lo mismo una vez más, pero la sensación es muy fuerte. Vuelve a decirlo una vez más y ayúdame.

lunes, 21 de junio de 2010

Sé yo mismo y no te arrepentirás....

"Báilame el agua.
Úntame de amor y otras fragancias de su jardín secreto.
Riégame de especias que dejen mi vida impregnada de tu olor.
Sácame de quicio.
Llévame a pasear atado con una correa que apriete demasiado.
Hazme sufrir.
Aviva las ascuas.
Ponme a secar como un trapo mojado.
No desates las cuerdas hasta que sea tarde.
Sírveme un vaso de agua ardiente y bendita que me queme por dentro, que no sea tuya ni mía, que sea de todos.
Líbrame de mi estigma.
Llámame tonto.
Sacrifica tu aureola.
Perdóname.
Olvida todo lo que haya podido decir hasta ahora.
No me arrastres.
No me asustes.
Vete lejos.
Pero no sueltes mi mano.
Empecemos de nuevo.
Sangra mi labio con sanguijuelas de colores.
Fuma un cigarro para mí.
Traga el humo.
Arréglalo y que no vuelva a estropearse.
Échalo fuera.
Crúzate conmigo en una autopista a cien por hora.
Sueña retorcido.
Sueña feliz, que yo me encargaré de tus enemigos.
Dame la llave de tus oídos.
Toca mis ojos abiertos.
Nota la textura del calor.
Hasta reventar.
Sé yo mismo y no te arrepentirás.
¿Por cuánto te vendes? Regálame a tus ídolos.
Yo te enviaré a los míos.
Píllate los dedos.
Los lameré hasta que no sepan a miel.
Hasta que no dejen de ser miel.
Sal, niega todo y después vuelve.
Te invito a un café.
Caliente claro.
Y sin azúcar. Sin aliento"
Bailame el agua, versión completa

Y perdimos el norte...

Pues si, puede decirse que lo perdimos. La sociedad anuló al individuo como elemento especial y único, lo absorbió y juntó todos los individuos en una masa informe sin identidad, haciéndole perder todo su sentido. Lo destruyó. Comenzaron a realizar medias, aproximaciones, estadisticas...medidas estandar para continuar con la progresiva anulación de la maravillosa variedad. Es cierto que es necesario estimar lo que viene siendo lo "normal" para ciertos aspectos de la vida, ciertos estudios...puede ser necesario para progresar. Pero se ha desbordado. Esa no-identidad intenta colarse hasta en los aspectos más fundamentales y personales, aquellos que hacen que alguien sea quien es y no otro.
Perdimos el norte cuando permitimos que la sociedad se hiciera dueña de nuestros valores. Pero es culpa también de nuestra propia "pereza intrínseca". El ser humano es vago por naturaleza. Dejarse llevar es lo más sencillo, dejar que otros piensen por nosotros y absorber como una simple esponja los conocimientos, las creencias y las ideas que se nos van dando progresivamente durante nuestra socialización. Para muchos, se trata de un proceso de mera acumulación e imitación de patrones. No se da una verdadera asimilación y un verdadero análisis crítico que permita extraer conclusiones propias y que sean estas conclusiones, desarrolladas por nosotros mismos las que vayan forjando nuestros propios valores a lo largo de nuestra vida. A pesar de que considero que existen valores inamovibles y comunes para todos, a los cuales cualquier persona por el mero hecho de ser racional puede considerar como primordiales. La razón es universal, no entiende de culturas, es puramente objetiva. Si logramos eliminar toda la subjetividad que nos invade por el hecho de habernos criado en una determinada sociedad, todos alcanzaríamos a discernir los mismos valores fundamentales e inamovibles. Luego, el resto de valores, no menos importantes sino aquellos que nos identifican como una persona u otra y que nos orientan en nuestra vida cotidiana elaborando un tipo de comportamiento u otro son los que dependen de nosotros mismos, de nuestro propio raciocinio y de otras variables, digamos más de tipo ambiental y personal-emocional.
Perdimos el norte cuando permitimos que la belleza física se convirtiera en la base del autoestima. Los estereotipos sociales crearon modelos supuestamente "ideales" que debemos anhelar, desear ser y esforzarnos para ello. Un cuerpo proporcionado y una cara bonita pasaron a convertirse en el sustento del propio autoconcepto. A la gente suele alagarle mucho más que le digan que es guapa y que esta delgada a que le reconozcan su inteligencia. Pero la belleza es efímera y no es objetiva sino que depende de los ojos que la miren. Hay algo mucho más fundamental dentro de nuestra propia esencia. El verdadero objetivo de la vida es sentir esa llamada "paz interior", esa sensación de estar satisfecho con uno mismo, de tener metas, de ir cumpliéndolas... la progresiva consecución de esta paz es lo debería generar el amor hacia nosotros mismos. La belleza física no debe ser una variable influyente en lo que a autoestima se refiere. Todos flaqueamos en algún momento, sobre todo cuando somos más vulnerables, en la adolescencia. La adolescencia es un periodo dificil, en el cual se esta produciendo un cambio importante. Las influencias externas son fundamenteles para el desarrollo, para el paso de la niñez a la edad adulta. Y la sociedad succiona el cerebro de los adolescentes e intenta implantarle las bases para la futura formación de principios, basados en ideas superfluas y llenas de conveniencia económica. El hecho de basar la autoestima en la belleza física puesde terminar en desequilibrios alimenticios en general. La disconformidad entre el prototipo deseado y la realidad (además normalmente alterada a peor) crea un sentimiento de culpabilidad, que intenta solucionarse sometiendo al cuerpo a un castigo, al caos. Todo para tratar de parecerse a esa imagen. Todo para nada a fin de cuentas. Esta en nuestra mano evitar prolongar la adolescencia durante toda nuestra vida. Reconozco que yo también pasé por ahí y me detuve un buen rato hasta darme cuenta de que me estaban manipulando. Para eso tenemos un "craneo privilegiado", así que, ¿por qué no lo usamos?
Perdimos el norte, aunque sinceramente, no sé cuando comenzó ni hasta donde va a llegar. No quiero imaginarlo...

"Pensar está al alcance de todos."


PINTURAS DE ISABEL GUERRA , superrealismo
(a la que adimiro profundamente. Adoro ese aire de absentismo del mundo, de divagación mental con el que dota a sus pinturas)"

lunes, 14 de junio de 2010

Al fin, satisfaction

Terminé. Hacía tiempo que no tenía esta sensación de tenerlo todo hecho, de poder permitirme el lujo de perder el tiempo viendo las horas pasar desde el sofá. Sumamente satisfecha de haberme escornado, de haber apurado los minutos trabajando a destajo, estrujando mis pobres neuronas mañana, tarde y noche. Todo el sacrificio ha merecido la pena y ahora puedo decir que estoy de vacaciones por fin. Tengo ganas de volver a casa, de ver a mis padres, a mi familia, a mis niñas, de estar en casa de nuevo. Pero no tengo ansias por ello, sé que llegará. Ahora prefiero seguir aquí unos días más, dejar hechas algunas cosas, pero principalmente poder disfrutar de la cosa que más quiero, una personita pequeña, mucho mejor de lo que cree que se ha ido haciendo un hueco en mí, poquito a poco hasta invadirme casi por completo. Dudo a veces de si me conviene o no me conviene, pero es una forma de engañarme. Somos opuestos, distintas formas de pensar, distintas formas de ver la vida, aunque creo que parecidas metas, salvando algunos matices. Estas diferencias a veces nos hacen distanciarnos. Ahora tengo tiempo para pensar en lo nuestro, pero me he dado cuenta que no tengo nada que pensar, porque ya lo decidí hace tiempo. Decidí quedarme con él porque lo quiero, lo quiero mucho y eso es lo que realmente importa. Estoy dispuesta a luchar por ello.

"Smilee! :)"

domingo, 6 de junio de 2010

Esta eres tú, quien lo iba a decir, tú

"Ésta eres tú, con los ojos cerrados bajo la lluvia. Nunca pensaste que estarías así, nunca te viste... como lo dirías, como... como esas personas que disfrutan mirando la luna, que se pasan horas mirando las olas o los atardeceres o el viento en los sauces, supongo que sabes de que clase de personas hablo, o a lo mejor no. Pero resulta que te gusta estar así, pelándote de frío, notando como el agua traspasa tu chaqueta, te llega a la piel. Y el olor. Y el tacto de la tierra que se hablanda. Y el sonido del agua chocando contra las hojas. Todas las cosas de las que hablan los libros que no has leído. Ésta eres tu, quien iba a pensarlo..."

" Esta eres tú"

"Esta soy yo. Me enorgullezco de ser como soy, disfrutando de las olas del mar en una playa desierta, de noche. Siempre he soñado con un beso apasionado bajo la lluvia, de esos que salen en las películas. Me encanta la poesía, aunque me cueste ponerme a leer, sobre todo al principio, hasta que permito que las palabras me envuelvan y me hagan partícipe de lo que dicen. El arte me maravilla, aunque no sea una gran entendida del tema. Me gusta escudriñar qué hay detrás de los trazos del pincel hasta llegar a esbozar los sentimientos del pintor.

Sensible, muy sensible, pero buscando la fortaleza que haga de ella virtud. Inteligente, tal vez no para los temas cotidianos, pero sí en lo referente a la escencia de las personas, que es lo que realmente me interesa. Comprender, descifrar, escudriñar dentro de los demas y comprender el por qué de todo y aplicar ese mismo interés en mí misma.
Las cuestiones divinas me vienen demasiado grandes, de ahí que me declare "agnóstica", aunque no sé si el término es correcto.
Busco la utópica incondicionalidad en alguien especial, me niego a creer que no exista.
Los abrazos y los mimos son siempre bien recibidos, aunque primero viene la confianza.
Poco atrevida pero obligada a serlo, reflexiva y melancólica si no encuentra respuesta... [...]"

Esta soy yo. No sé si maravilla o cúmulo de desastres, pero yo al fin y al cabo, y aquí estoy, sentada sin ropa frente a tus ojos, habiendo comprendido que no puedo cambiarte, que no debo querer que cambies, sino que debo valorar si quiero aceptarte a tí y a tu amigo con el que vas de la mano, inseparables como dos caras de una misma moneda. Adorable y brusco al mismo tiempo según a quien le toque gobernar y tirar del carro. La valoración no deja de ser complicada. Pueden dejarse de lados los sentimientos y oír sus quejas dede lo más profundo del corazón mientras la razón decide, o bien dejarse guiar por ellos y resistir los golpes en la sien que la razón te propina. No es cuestión de equilibrio, me temo. Constante y pesada dicotomía...


*Ahora, en este momento, quisiera que estuvieras aquí conmigo...

sábado, 5 de junio de 2010

Again, but still worse

Me aterra sentir que puede estar cerca de aquí, cada vez más.
La cercanía constituye una competición sin misterio, sin dudas de ganador. Conquista cada vez más de mi terreno, lo invade con su presencia y yo no puedo si quiera intentar apoderarme de su parte de vida. A ella le corresponde, es dueña desde hace muchos años.
El destino ya está escrito. Las distancias actuales pronto serán sustituidas por complicidad forjada años atrás. Tal vez pueda incluso trasladarse a mi parcela, dejandome completamente fuera de juego.
No hay nada que pueda hacer al respecto. Debo aceptar que se lleve mi trofeo, mi trocito de cielo pues hay más razones para que sea así que para que no lo sea.
Me queda esperar y buscar el olvido con el paso de los días. Creo que es comprensible y no pienso competir. Será como deba ser.

"Por cada vez que tú no te acuerdes, yo lo recordaré dos veces"

viernes, 4 de junio de 2010

Reflexión 6

    - Mira, no quiero ser pesada, pero quisiera saber hasta cuándo vas a estar así.

    - ¿Así como?

    - Así. Demasiado cautelosa, demasiado tolerante, demasiado paciente...demasiado, demasiado, demasiado, mi pequeña infeliz. Qué pasa, ¿no te das cuenta? Dime, cuánto te falta ¿eh? Cuánto te falta para volver a estallar expulsando una nube completamente incomprensible e ininterpretable de pensamientos y sentimientos entremezclados, formando una “barrejada” debido a lo poco que los has tratado o bien a lo demasiado que los has tratado y a lo poco que los has expresado al exterior. Entonces lo único que podrás hacer será llorar y seguir llorando hasta que alcances otra vez el estado inicial. Pero sabes qué te digo, que esa no es la forma; y lo sabes. Lo sabes porque te engañas pensando que eres así, pero no lo eres, o al menos una parte de tí no lo es. ¿Por qué no cambias de estrategia y me haces caso, aunque sea por una vez en tu vida? Dilo todo, quéjate, di que no te parece bien, que te molesta el comentario, que no te gusta que lo tome con tanta vanalidad. Dilo joder, haz el esfuerzo de cambiar la perspectiva. Cambia el estilo de afrontamiento, del pasivo, la evasión y la consecuente aceptación a la acción. Tienes poder para cambiar las cosas, al menos las que a tí te conciernen. Sino ¿qué demonios vas a hacer? ¿Vas a pasar toda tu vida aceptando las imposiciones ajenas?

    - ¿Y qué coño crees que hago? Joder, ¿es que nadie lo ve? ¿De verdad que no? Es realmente desesperante sentirse luchando día tras día contra tí misma. Sentir que estas exprimiendo al máximo tus esfuerzos, que te estas obligando cognitivamente a ir por otro sitio, a guiar a los sentimientos hacia el lugar adecuado y a no permitirles que te dominen. Flaquear de vez en cuando es completamente inevitable. Me conoces desde siempre, maldita sea, sabes como he sido antes y cómo soy ahora. Párate un momento y compara ambos momentos. ¿no ves acaso mejoría?

    - Eso no te lo voy a negar. Pero sigues tropezando siempre con lo mismo. Cada vez estoy más convencida de que te estas esforzando, pero no estas focalizando los esfuerzos en el problema central. Te entretienes en detalles minúsculos, en elementos contextuales y no en la esencia, en tu propia esencia, que es donde está tu verdadero problema. Ya sabes lo que opino de él y de todas las implicaciones emocionales demasiado profundas que tengas. No puedes permitírtelo. No puedes si no eres capaz de modificar tu visión hacia ello. Sé que te ayuda y tal vez sean necesarios pero debes obligarte a actuar de otra forma. Pensé que tal vez actuaría como detonante, que te ayudaría a que se te hiciera más fácil decir lo que piensas...

    - ¡Y tú también sabes lo que opino!. Es lo mejor que me ha pasado en la vida. Es una gran ayuda y no me arrepiento en absoluto. No podía dejar pasar una oportunidad así, ni siquiera se me paso por la cabeza la posiblidad de dejar que se fuera. He aprendido mucho gracias a su ayuda, me ha traspasado la visión que tiene de mí, una visión mucho más positiva que la mía, desde luego.

    - De acuerdo, pero estas volviendo a la dependencia de nuevo. ¿Qué va a pasar cuando no esté, cuando se marche definitivamente? Sabes que lo hará, ya te dije el otro día que la incondicionalidad es una utopía. Te esmeras en detalles, en demostraciones constantes porque así es como te sientes bien. Cuando amas, amas de verdad. Eres realmente maravillosa en ese sentido, puesto que no creo que pueda sentirse para nada insatisfecho. Sin embargo eso no significa que no vaya a marcharse. Puede ser que seas tú la que se vaya definitivamente, también cabe esa posibilidad. Pero, y si no es así, ¿qué demonios vas a hacer?¿Tienes idea de que va a ser como retroceder mil pasos, de lo perdida que te vas a encontrar?

    Se dio cuenta de que ya no la escuchaba. Me hacía demasiado daño lo que decía. Suspiró profundamente, como exhausta por la conversación. Se levantó de la silla y se acercó a mí. Me acarició la cabeza y dijo “tienes que escucharme más a menudo. Sé que es duro para tí pero es necesario que lo hagas. Veo cosas que tú no ves y trato de que las veas. Tan solo quiero lo mejor para tí, para las dos”. Se alejó por el largo pasillo hasta que la perdí de vista. Escuché el ruido de la puerta al cerrarse. Como suele sucederme siempre, me quedé pensando largamente en sus palabras hasta que las primeras lágrimas comenzaron a asomar, ya que tal vez tenía razón y yo no estaba a la altura...



    "Sigo siendo la misma niña ingenua que dibuja corazones en el suelo, imaginando su propia historia de amor"



martes, 25 de mayo de 2010

Reflexión 5

"- Bueno, y cómo lo llevas?- me preguntó mientras ojeaba las fotos que tenía puestas en la pared adornando mi habitación. Desde siempre me ha gustado llenar la parede de cosas, sobre todo de fotos. La luz de la mesita de noche tintineaba. Sabía que debía comprar una lámpara nueva, pero no quería desprenderme de ella. Me la había regalado mi abuelo, así que tenía mucho valor sentimental para mí, sobre todo desde que él ya no estaba. - Pues bueno, es algo dificil de aceptar, sobre todo cuando no quieres hacerlo- le respondí. - Es cierto. Es realmente costoso aceptar que estamos solos, pero es necesario. Todos lo estamos a fin de cuentas. Nacemos solos y desde que comenzamos a ser conscientes, nos pasamos la vida tratando de encontrar a alguien. Se llenan la boca diciendo que somos seres sociales. Sí, claro que lo somos, pero eso no significa que no estemos solos. Necesitamos a la sociedad, aunque solo sea para llegar a ser personas, aprender a hablar, saber que tenemos que ducharnos y utilizar la cuchara para comer la sopa. Podemos tener amigos con los que vamos al cine, estudiamos o salimos de fiesta. Pero a fin de cuentas, seguimos estando solos. La gente viene y va, me atrevería a decir que nadie permanece, salvo nosotros mismos. - Es demasiado triste como para aceptarlo. De hecho, todavía no he decidido si quiero hacerlo- confesé. Me levanté a intentar arreglar el constante tintineo. Toqueteé la bombilla pero al hacerlo me quemé, como era de esperar. Maldita manía mía de no pensar antes de actuar o bien de pensar demasiado y no actuar. Pocas veces encontraba el término medio. - Considero que no deberías engañarte. Tampoco creo que sea algo negativo. Simplemente es; es así y debemos aceptarlo tal y como viene, dado que es de esas cosas que, aunque nosotros nos consideremos capaces, no podemos cambiar, como otras muchas cosas. Viene escrito en nuestra esencia. Aceptarlo, es cuestión de supervivencia. Sino, nos estaremos engañando continuamente, y dedicaremos más esfuerzos a tratar de no sentirnos solos que a hacernos más fuertes para el día a día, que es lo que nos interesa realmente-. Se puso colorada, encendida, como siempre que defendía su postura, elocuente y racional. Todo lo contrario a lo que yo era. Lo cierto es que no hablaba mucho. No confiaba en la gente. Sin embargo, conmigo si. Conmigo siempre dejaba fluir sus ideas, sus pensamientos sin cortapisas. Creo que lo hacía porque era la única persona que la escuchaba, que la escuchaba de verdad. Últimamente, se estaba tomando muchas molestias en trasladar su punto de vista al mío. Quería que reaccionara, que dejara de ser tan "sentimentalona y debilucha", como ella me llamaba. Desde que recuerdo, plasmaba sus inquietudes sobre mis ojos, pero nunca había tratado un tema con tanta vehemencia ni había intentado que cambiara mi parecer. Había algo detrás de toda esa insistencia y de ese interés particular. Pero me sería imposible adivinarlo, a menos que ella me lo dijera, pues siempre había sido dura en esencia, impenetrable. Recuerdo aquella época que tuve en la que lloraba día sí y día también sin saber el motivo. Jamás se compadeció de mí ni me prestó uno de sus escasos abrazos. Me miraba como si no me entendiera, fría e impasible a todo, como siempre. Reconozco que muchas veces la envidiaba, aunque no me gustara lo que decía, como en esta ocasión. No quería pensar que estaba sola. Me gustaba pensar que había mucha gente que me quería, que disfrutaba con mi compañía y con la que podía contar en momentos de alegría y también de aflicción. - Joder, es que no me entiendes! No me refiero a ese tipo de cariño-afecto del contacto. Me refiero a la incondicionalidad, a ese "voy a estar ahí siempre". Eso nadie puede cumplirlo. Prometerlo sí, claro, a la gente se le da muy bien mentir y creérselo. La única manera de evitar la soledad, con la soledad duradera, la de verdad, es contar con la incondicionalidad de alguien. Y, siento mucho tener que decirtelo, pero nadie cuenta con eso. Las traiciones están a la orden del día, incluso entre las personas que dicen que se aman y la capacidad para perdonar sin pasarse todo el tiempo recriminando también brilla por su ausencia. De modo que la incondicionalidad es una utopía...Luchar por ella es perder el tiempo.-
Cuando por fin se fue de casa, me quedé pensando largamente en sus palabras. Rebosaban racionalidad y eran perfectamente comprobables. Todavía una parte de mí se resistía a creerlo, pero tal vez había llegado el momento de aceptar que realmente sí estaba sola..."

lunes, 24 de mayo de 2010

Reflexión 4

"-No sabes lo que supone para mí que me digas esas cosas-le dije. Era un día cualquiera, no había sucedido nada fuera de lo normal. Había amanecido de nuevo. El sol brillaba con fuerza, pues era ya mediodía, aunque desde la ventana de su cuarto no se apreciara. Volví a abrir los ojos, sonriendo, con la seguridad de que seguía allí. Todavía dormía profundamente, tumbado boca abajo muy cerca del borde de la cama, con su carita de niño contra la almohada. Es sumamente agradable sentir el calor que su cuerpo deja en la cama, su olor en las sábanas.
Su presencia, su habitación, sus cosas, las ropas entrelazadas en el suelo, creaban un espacio de refugio, de paz. Era un escondite del mundo, donde no era consciente del paso de las horas. Era uno de los pocos sitios donde me sentía segura, uno de los pocos sitios en los que realmente quería estar. No había fronteras con su piel. Era tanta la complicidad y la entrega que lo veía como una prolongación de mi cuerpo. No había zonas prohibidas para los ojos ni para las manos.
Ahora ya ha despertado. Se esconde entre las sábanas lamentando que la noche haya terminado. Lo cierto es que a mi también me da pena. Me reuno con él bajo las sábanas y juntos nos olvidamos del mundo que nos rodea. No puede haber nadie más feliz..."



"Me dejaré llevar, a ningun lugar"

domingo, 23 de mayo de 2010

Siempre conmigo

Hemos vivido muy buenos momentos, son ya varios años juntas. Siempre me acuerdo de vosotras, mucho. Me había acostumbrado a veros todos los días, a formar parte de vuestra vida de una forma particular, y a que vosotras también formarais parte de la mía. No quiero desprenderme de esa parte de mi vida que os corresponde, porque sería dejar de ser yo misma. He aprendido muchas cosas con vosotras y de vosotras. Es mucha la confianza y la complicidad labrada a lo largo de los años.
Tengo muchas ganas de volver, de recuperar el tiempo que no hemos podido pasar juntas durante este año. Es sumamente complicado compaginar lo que supone estar tan lejos, las nuevas puertas que se abren, las nuevas experiencias con nuevas personas con los recuerdos y con lo que todavía me seguis aportando.
Solo quiero que sepais que sigo siendo una de vosotras y que siempre sereis las mejores para mí. Os quiero mucho, tanto como solo puede quererse a muy pocas personas.


"Os hecho de menos..."

viernes, 21 de mayo de 2010

Reflexión 3

"Me da miedo lo desonocido. Nunca se lo digo a la gente. No me gusta que me vean como una niña indefensa y asustada. Prefiero ocultarlo y dar la impresión de que me apasionan los cambios y las cosas que suceden sin previo aviso. Pero lo cierto es que soy de las que piensan que van a llegar tarde, van a perder el tren, el avión, el autobús...va a perder la maleta, no va a acertar a encontrar la salida adecuada del aeropuerto...Bueno, tal vez sí me gusten los cambios, pero no al principio. Al principio, cuando no sabes donde estás, la gente te habla y no le entiendes. Vas por la calle y no entiendes lo que pone en los carteles. Te equivocas de autobús, o directamente te pierdes y acabas en medio de ninguna parte...no deja de ser frustrante y desconsolador verte tan desorientada. El tiempo que tardo en tomarme todo eso a risa es el tiempo que tardo en darme cuenta de que soy capaz de sobrevivir yo solita, que no pasa nada porque al principio haya habido algún pequeño, minúsculo, insignificante problema. Debería haberlo visto así desde el principio. Hubiera sido mucho más fácil y me hubiera ahorrado el trabajo cognitivo de tener que convencerme a mí misma de la verdad objetiva de la situación. Es inutil, siempre acaba pasandome lo mismo. Hago el trabajo dos veces porque siempre tengo que realizar un doble análisis de las situaciones, porque me doy cuenta que el otro, ecológicamente hablando que es lo que interesa, es bastante pobre y me sirve de bien poco. Bueno, tal vez a base de ensayar por fin lo consiga.

domingo, 16 de mayo de 2010

Reflexión 2

"No podía numerar la cantidad de veces que se sentía como una pequeña gota perdida en el fondo de algún lugar que no sabe cuál es. Y si ni siquiera lo sabe, mal va a sentir que es el adecuado. Una gotita pequeña e insignificantem que se reduce a sí misma día tras día. Se come sus pensamientos de aperitivo que se acumulan y acaban evocándose al exterior en una nube indefinida de sensaciones, imposibles de canalizar e imposibles de comprender. A veces, incluso a ella misma le cuesta. Se repite y se obceca en las mismas palabras de siempre, coronan su cabeza de luz y continúa cerrandose a ellas sin atreverse a explorar más allá.
Añora el mar del que solía formar parte. Donde todo estaba hecho y desde donde miraba las estrellas tumbada en la arena soñando y anhelando lo que ahora tiene, solo que tal vez no lo imaginaba así. Paradójicamente ahora añora volver. A veces le parece demasiado dificil continuar. Se siente increiblemente sola e incapaz de cargar con las preocupaciones, las circunstancias que día tras día van hacinándose sobre su frágil espalda. Lo que subyace a todo este arsenal de ideas, el hecho por el cual todo le parece tan complicado, es inherente a su propia esencia, y si desaparece, ella también lo hará. - Pero no quiero, de verdad que no quiero!.


"Soy la gota que se queda, en la botella,
esa hoja que se mueve, con el viento,
la mirada que se pierde en las estrellas,
las palabras que se gastan con el tiempo..."

"Lloraba tejiendo silencios, tratando de llenar su propio vacío, su propia incomprensión..
Solía coger su corazón entre sus manos y acercarlo a su oido, para escuchar sus propios latidos,
para sentirse viva"




Grita




Es lo único que me apetece hacer. La única acción que, si llevara a cabo, me sentiría identificada con ella en estos momentos.
Todo se debe a esa sensación tan incómoda de que la vida te atrapa a tí y no tú a ella. Ella es la que tiene tu cabeza en el yugo, y la que ahora dirige el camino, independientemente de lo que tú quieras hacer.
Realmente me molesta estar sola en estos momentos, y sobre todo pensar que voy a estarlo todo el día. Eso todavía hace que me sienta más atrapada. El ritmo de la semana ha sido realmente alto y como consecuencia estoy exhausta. Lo peor de todo es que todavía quedan dos más, peores aún si cabe, ya que al trabajo constante hay que sumarle los agovios y las preocupaciones de los exámenes en sí mismos y no solo de su lejana sombra.
Sin embargo, estoy satisfecha. No he perdido el tiempo mientras veía como otros lo perdían, aunque supongo que pueden permitírselo. Y lo más importante, las inconmensurables ganas de gritar y de romper han sido bien canalizadas por mi indispensable corteza prefrontal. De modo que debo dar las gracias por el autocontrol.
Y con toda la poca resignación que me queda en estos momentos y la mucha responsabilidad que se me ha proporcionado con la socialización, (demasiada, cada vez estoy más segura) volveré al circulo que muy pocos logran romper y abandonar (dentro de los cuales yo no estoy incluida)...mierda.

viernes, 14 de mayo de 2010

Reflexión 1

"Bueno, y ahora dime qué es lo que ves. - Nada, le dije. Y era la verdad. Por mucho que me esforzara, no veía nada. Bajé la mirada e intenté alejarme del lugar. Comenzaba a sentirme incómoda y con ganas de llorar. No me gustaba llorar delante de los demás, y mucho menos de él. Me cogió por el brazo y me obligó a quedarme. - ¿Estas segura? Vuelve a mirar y fíjate bien. Vamos, no seas testaruda. Inténtalo de nuevo- . Alcé la cabeza desde mis pies, lévemente. Me esforcé de nuevo por mirar más allá. Me agarró de la mano, con fuerza. Pero esta vez no era para que no me fuera. Podía sentir su energía fluyendo por mis venas. Me transmitió valor y fortaleza, algo de lo que yo carecía y a él le sobraba, algo por lo que había sufrido, como mostraba la cicatriz en su pecho de años atrás. - Veo algo pequeño y frágil moviéndose en el horizonte. Esta intentando mantenerse a flote, pero le cuesta mucho. Es como si algo estuviera tiarando de él desde abajo. Patalea e intenta liberarse. Sentí una enorme tristeza y el corazón se aceleró. Las ganas de llorar aumentaron.
Me giró entonces hasta encontrarme con sus ojos verdes. Me miró fijamente y me dijo.- Ya lo has visto. Ahora debes actuar antes de que sea tarde. Yo no puedo ayudarte a eso-. Me cogió la mano y la guió hacia su pecho, tocando con ella su cicatriz. No era la primera vez que lo hacía. Siempre solía enseñármela e invitarme a recorrerla con mis dedos materializando el valor y la fortaleza que se escondían tras ella. Era su manera de recordarme que siempre, bajo cualquier circunstancia, jamás debía sucumbir y que si lo permitía, ambos valores tirarían de mí cuando todo lo demás no lo hiciera.
Me giré entonces de nuevo hacia la visión. Alargue el brazo, tocando el límite del espejo que tenía justo en frente. Debía enfrentarme y debía hacerlo sola. Cerré los ojos y me sentí transportar a otro lugar. Era un lugar conocido pero a la vez extraño. Volví a encontrarme de nuevo con la visión anterior, pero esta vez estaba mucho más cerca. Acerté a visualizar que se trataba de una chica joven y que todavía estaba luchando por deshacerse de algo que la empujaba hacia abajo. En un impulso corrí hacia ella. Sabía que tenía que ayudarda. La cogí de las manos y tiré de ella con todas mis fuerzas. Sabía que él estaba conmigo, y lo sentía tirando de ella a la vez que yo. Por fin lo conseguimos. Del impulso, salí disparada hacia una pared cercana y me golpeé en la cabeza. Antes de desvanecerme, me di cuenta que aquella chica era yo misma...
Cuando volví a despertar, estaba de nuevo en mi cama. La cabeza me daba vueltas todavía, supongo que del golpe. Allí estaba él de nuevo, sentado y mirándome con una sonrisa. Muy pocas veces sonreía.- Estoy orgulloso de tí, me dijo. Se acercó y me abrazó. Pude sentir de nuevo su fuerza y su valor envolviéndome. Aquella noche se marchó y ya no volví a verlo..."

jueves, 6 de mayo de 2010

La clave está en la confianza

No podemos ceñirnos a experiencias pasadas (sobre todo a las malas) en nuestro avance por la vida. En inevitable que estas formen una parte inseparable de nuestra vida. Debemos aprender, a base de golpearnos contra la pared, a ser cautos y precavidos a la hora de elegir compañías. Este es el aporte principal que deben proporcionanos las malas experiencias pasadas. Sin embargo, nunca debemos perder la capacidad de confiar en las personas ya que debemos mostrarnos seguros de nosotros mismos y considerar que hemos aprendido la lección pasada y que esta vez hemos elegido bien y no van a clavarnos el puñal por la espalda. Es cierto que hay personas que saben camuflar muy bien su personalidad perversa y retorcida bajo una fachada de aparente bondad y disposición. Tan grande es el engaño que la puñalada es totalmente inesperada. A mi me ha pasado veces y más veces. Sin embargo me resisto a dejar de confiar en la gente y a dejar de tener fe en ellas. Hay personas que son realmente íntegras, honradas y sobre todo, llenas de buenas intenciones. La clave está en saber distinguirlas del resto (o en saber distinguir a los malos de los buenos, si se es más optimista que yo :)).

La confianza es fundamental para saber de quién rodearse, para saber a quién permitirle que penetre en el conocimiento de nuestra esencia más pura, de lo que realmente somos. No podemos ir por ahí desconfiando de los demás sin dar siquiera una opción al cometimiento de algún error que sustente dicho reproche.


Confía en mí, porque yo soy de las buenas :)

sábado, 1 de mayo de 2010

La peor época...

Comienza la peor de las épocas para la vida del estudiante universitario. Comienzan los agobios y los días de estudio intensivo. A cosa de algo más de dos semanas para empezar los exámenes, no puedo menos que empezar a sentir ese desasosiego y esa voz torturante de mi conciencia diciéndome "estudia, estudia, estudia...". Pero hoy es un día poco propicio para ello. Me he levantado cansada, no se como puede ser posible. Tal vez porque la semana anterior, en la que he tenido un examen bastante duro y en la que he tenido que solucionar varios problemas sentimentales, el estrés acumulado y los quebraderos de cabeza han hecho mella. Además, he retrasado la hora de la cita con mi chico varias horas, tan solo porque mi conciencia no me lo permite, porque tengo la esperanza de obligarme a estudiar un rato antes de verlo, y asi deshechar cualquier posible discusión debido a mi agobio y a mis pocas ganas de hacer nada aunque tenga que hacerlo.




Es un asco. El tema es que no tengo NADA preparado. No llevo NINGUNA asignatura al día. Lo peor de todo es que tampoco he tenido tiempo para hacerlo antes. Este año se está llevando la palma en cuanto a exigencia. No doy abasto, tal vez la demanda es demasiado para mis recursos.
Tal vez debería dejar pasar este fin de semana, relajarme, entretener la mente con otras cosas y comenzar el lunes y ya no volver a parar.
Espero que las perspectivas mejoren, porque sino, junio será también un mes salmantino al 100%... :S

martes, 27 de abril de 2010

Olvídame!!!

No me gusta que me miren. Padezco lo que se conoce como inhibición social, lo que significa que si alguien me observa mientras hago una tarea, voy a cometer más errores o voy a tardar mucho más tiempo en terminar. Por esto, cometía muchos más errores intentando evitar salvar a un pobre cuadradito, moviéndolo de un lado a otro, de unos enormes figuras que se avalanzaban sobre él cuando mi novio estaba detrás observándome que cuando tenía la seguridad de que no me miraba. Es lo mismo que sucede cuando, en medio del examen, el profesor se te planta delante y parece que intenta leer lo que estas poniendo. Ante esa situación, no puedo evitar que mi nivel de activación aumente, que desenfoque mi atención de la tarea principal y no de pie con bola.

Pero todavía me gusta menos que observen descaradamente mis movimientos, con ese aire de suficiencia y por encima del hombro como haces tú. Cada vez que (desgraciadamente), tengo que entrar a tu clase por compaginar mi horario o cada vez que nos cruzamos por el pasillo o cuando entro a la biblioteca y tú (desgraciadamente) ya estás alli, me observas. Me observas con todo el descaro del mundo, incluso con tu novia delante!. Entonces, cuando te devuelvo la mirada en plan "Y a ti que coño te pasa, tio?", entonces, no tienes los huevos suficientes para enfrentarte a mí y mantenerla.
Realmente no sé cual es tu propósito. Podrías aprender un poco de tu adorable novia, a la que agradezco inmensamente esa indiferencia y esa forma de actuar "como si no me conociera".
Lo cierto es que tus motivos no me interesan, pero algún día que me levante con el pie izquierdo, igual te caen un par de hostias bien dadas, porque ni se te pase en algún momento por la cabeza que me intimidas, flacucho. Lo cierto es que las tienes bien merecidas, por todo lo que me dijiste (por msn, porque eres un cobarde de mierda) y lo mal que me hiciste sentir, por ser un calzonazos y meter las narices donde nadie te llamaba ya que a tí ni te iba ni te venía el asunto.
Además de dejarte comer el cerebro por la mejor de las manipuladoras que existen y de después, (basándote en una mentira que ella te contó), soltar una serie de barbaridades tratando de humillarme, ahora te dedicas a mirame con todo el descaro del mundo. No me toques los huevos, te lo advierto, o cuando menos te lo esperes te estampo la carpeta en la cara, joder!



Te la estas ganando...

Agradece que no soy violenta ni una barriobajera, que sino...