martes, 28 de junio de 2011

Más raro fue aquél verano, que no paró de nevar

Acercate a mi, lento
Háblame al oido, así, susurrando
Juntemos las yemas de los dedos
Ven, duerme conmigo esta noche y las 10.000 restantes,
te cantaré una canción y prometo volverme loca, inesperada.
Vamos, déjame sin aliento.
Te daré una sorpresa, verás como la luna nos quema.
Pedirás que te queme más, que te envuelva en su loca cordura de palabras silbadas en el viento, de gatos en la noche que no duermen, de caricias insospechadas, de juegos de manos...

Sigue soñando,
apretando las sábanas contra mi cuerpo.
Pero este vacío no lo llenan mis manos,
este vacío solo espera que llames, que digas mi nombre seguido de algo que suene bonito.
Solo espera que me llames..

Te echo tanto de menos...